El proceso del parto en una perra es un momento emocionante y a la vez lleno de incertidumbre para los propietarios. Comprender los aspectos básicos del parto y estar preparado puede marcar la diferencia en la experiencia tanto para la perra como para sus dueños.
GESTACIÓN. ¿CÓMO PREPARARSE PARA EL PARTO?
El parto en una perra es un proceso natural y fisiológico, pero para los propietarios puede resultar desconcertante si no están familiarizados con él. Es importante recordar que, aunque el parto puede generar ansiedad, la clave es estar bien informado y permanecer tranquilo para tomar las decisiones adecuadas.
El período de gestación en una perra dura aproximadamente entre 58 y 68 días. En las semanas previas al parto, es esencial preparar una zona de parto cómoda y tranquila para la perra. Un lugar apartado, cálido y libre de distracciones es ideal. Proporcionar una caja de parto o una cama cómoda, junto con mantas suaves, garantizará que la perra tenga un lugar seguro para dar a luz.
PARTO. ESTADIOS Y CÓMO ACTUAR
El parto de una perra se divide en tres estadios, cada uno con sus propias características y duración.
- Estadio I. Es el inicio del trabajo de parto. En esta fase, la perra puede mostrar signos de inquietud, como buscar un lugar apartado, jadear con más frecuencia y rascar el suelo o la cama. Es esencial que esté en un ambiente tranquilo y libre de estrés.
- Estadio II. Es el momento real del parto, donde los cachorros nacen. Cuando el cachorro nace, la madre romperá cuidadosamente el saco amniótico y lo limpiará, estimulando su respiración y eliminando los fluidos.
- Estadio III. El tercer y último estadio es la expulsión de la placenta. Al nace un cada cachorro, la perra expulsará la placenta correspondiente. Es normal que la madre coma algunas de las placentas, ya que esto puede ayudar a reponer los nutrientes perdidos durante el parto. Sin embargo, si expulsa muchas placentas y no las está consumiendo, o si parece tener dificultades en este proceso, es aconsejable consultar a un veterinario.
Acompañar a la perra durante el parto implica mantener una actitud tranquila y observadora. Puedes estar presente para proporcionarle apoyo emocional y confort, pero evita interferir a menos que sea absolutamente necesario. La madre es instintiva y naturalmente sabe cómo cuidar de sus cachorros. Sin embargo, en caso de que la madre no realice la limpieza y estimulación adecuadas para que los cachorros respiren, los propietarios pueden intervenir suavemente usando un paño tibio y húmedo para imitar la acción de la madre.
POSTPARTO. ¿CÓMO ACTUAR?
Es normal que la madre esté cansada después de dar a luz, por lo que asegurarse de que tenga un lugar tranquilo y cómodo para descansar es esencial. Asimismo, proporcionar agua fresca y comida nutritiva también es importante para reponer las energías que se han gastado durante el parto. Mantén el ambiente limpio y cálido y si bien es tentador interactuar con los cachorros, permite que la madre establezca el ritmo de la interacción.
Recuerda que el período después del parto es una fase crítica en la que tanto la madre como los cachorros necesitan cuidado y atención constante. Asegúrate de que el proceso de recuperación es efectivo y seguro y consulta a un veterinario para cualquier duda que pueda surgirte.
¿CUÁNDO ACUDIR A UN VETERINARIO?
Aunque es preferible realizar el parto en un lugar familiar y en el que la perra se sienta cómoda y segura, hay situaciones en las que, inevitablemente, se debe buscar atención veterinaria, como ocurre en los siguientes escenarios:
- Gestación superior a 64 días. Si la gestación dura más de lo normal, un profesional debería valorar si es necesario realizar una cesárea.
- Sangrado excesivo. Si la perra está sangrando profusamente durante el parto, podría indicar una complicación.
- Dificultad al dar a luz. Si el estadio II dura más de 30 minutos y no consigue expulsar al cachorro, se debe consultar a un profesional.
- Cachorro atascado. Si un cachorro se queda atascado en el momento del parto, es crucial no intervenir y solicitar ayuda veterinaria.
- Dolor o malestar extremos. Si la perra parece estar sufriendo mucho dolor o muestra signos de malestar extremo, consultar a un veterinario.
Aunque no ocurra ninguna de estas situaciones, los problemas también pueden surgir una vez finalizado el parto. Si notas que los cachorros no están ganando peso o no se están alimentando regularmente, o que la madre está débil o rechaza a alguno de ellos, busca atención veterinaria de inmediato. Si acudes a Vacumóvil, podemos hacer este proceso mucho más tranquilo para ti y para tu perra, ya que nos desplazaremos a tu domiciliopara asistir durante cualquier etapa del parto. Así, podrás acceder a atención veterinaria de la mejor calidad sin tener que alejar a tu perra del lugar que ella ha elegido para dar a luz a sus cachorros